La incertidumbre por las elecciones es total en los Estados Unidos y, por supuesto, en todo el mundo. La paridad en los sondeos es total. Ninguno de los dos candidatos ha logrado mantener la ventaja que tuvieron en algún momento de la campaña electoral. Para Donald Trump todo parecía encaminado sin problemas hacia su regreso a la Casa Blanca.
Pero claro, durante medio año, se la pasó atacando a su contrincante por su avanzada edad y una declinación en su capacidad mental como para aspirar a otros 4 años en el poder. Por supuesto, se refería en ese momento al presidente Joe Biden y sus 81 años.
Pero su crítica y los «bloopers» constantes del presidente tal vez, finalmente le jugaron en contra al popio Trump. El partido demócrata trabajo luego del desastroso debate presidencial para que Biden bajara su candidatura y eso fue lo que sucedió. En Agosto, Kamala Harris, su vicepresidenta, tomó la posta como candidata presidencial.
El mero anuncio y sus primeras apariciones formales como candidata cruzaron las líneas de las encuestas. Kamala Harris alcanzó y superó a Donald Trump. Y recolectaba voluntades y mucho más dinero que el republicano para financiar la campaña.
Pero pasado el efecto de la «novedad Kamala», Trump comenzó levemente a repuntar y sigue hasta este momento. A tal punto que la brecha en los sondeos, desde el mes de octubre, comenzó a achicarse y hoy -a sólo 24 horas del comicio- ninguna encuestadora le da más de dos puntos de ventaja a cualquiera de los dos. Harris y Trump están empatados virtualmente.
Al día de hoy, en los sondeos del New York Times, Kamala tiene un 49% de intención de voto y Trump llega al 48%. Técnicamente, para los encuestadores, eso expresa un empate y hace imposible que se pueda arriesgar un ganador.
Por lo tanto, hay que buscar indicios en los 7 estados denominados «pendulares» o «swing states» (por «swing» o cambio, en inglés). Son justamente los que por no seguir siempre a un partido sino decidirse por la impronta de los candidatos, a veces votan por republicanos y a veces por demócratas.