Luego del conflicto entre Mauro Icardi y Wanda Nara ocurrido el viernes pasado en el Chateau Libertador, la Justicia tomó nuevas decisiones en el caso. Uno de los primeros datos que trascendió fue la renuncia de las abogadas del futbolista tras los hechos ocurridos en presencia de menores.

La resolución judicial se basa en un informe del equipo técnico infanto-juvenil del Ministerio Público y del cuerpo interdisciplinario, que evaluó la situación familiar. Según lo dictaminado por el defensor de menores y las recomendaciones del equipo técnico, se estableció que, como medida cautelar, tanto Icardi como Nara deberán acreditar, en un plazo de diez días, el inicio de los tratamientos psicológicos individuales recomendados.


En el programa LAM, Ángel de Brito leyó la resolución del Juzgado N° 106: “Como medida cautelar, las partes deberán presentar en un plazo de diez días el resultado inicial de los tratamientos psicológicos individuales sugeridos”.



Además, se dispuso la intervención del equipo de Revinculaciones Judiciales del Ministerio Público Tutelar para supervisar la eventual revinculación de las hijas con su padre, Mauro Icardi. Esto implica que los encuentros se realizarán bajo el seguimiento de especialistas en psicopedagogía y con pautas específicas para garantizar un proceso adecuado.
Asimismo, se ordenó que el delantero se haga cargo del tratamiento terapéutico de las niñas, según las indicaciones del equipo técnico del Ministerio Público Tutelar. Para ello, ambas partes deberán proponer nombres de terapeutas que cumplan con los requisitos establecidos, informando sus domicilios y la frecuencia de las sesiones. La elección final de los profesionales será coordinada en conjunto con el equipo de Revinculaciones Judiciales.
Previamente, la Justicia había ordenado que Wanda Nara continuara con su terapia psicológica y que Mauro Icardi iniciara un tratamiento. Ahora, ambas partes deberán presentar un certificado que acredite el cumplimiento de estas terapias dentro del plazo establecido.